Espíritu Emprendedor TES 2023, Vol 7, No. 2 abril junio 1-15
Artículo Científico
Indexada Latindex Catálogo 2.0
ISSN 2602-8093
DOI: 10.33970/eetes.v7.n2.2023.334
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Revista Trimestral del Instituto Superior Universitario Espíritu Santo
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El término estimulación con fines científicos tiene su origen en la Psicología y la
Fisiología. En la temática relacionada a las potencialidades talentosas, este término ha sido
utilizado. La autora asume estimulación del talento, según Calzadilla (2014), como:
“…diseño, implementación, seguimiento y evaluación de esfuerzos especiales por
implementar una educación diferenciada, desarrolladora que tome en consideración las
potencialidades y necesidades individuales de cada estudiante, pero que adicionalmente
invierta un esfuerzo especial en la atención educativa a los estudiantes sobresalientes por sus
posibilidades y desempeño, quienes comúnmente encuentran pocos espacios académicos
para satisfacer sus necesidades e intereses”.
Castellanos (2003) y más tarde, Sauste (2012) refieren que, para la estimulación del
talento académico, se aconsejan programas de extensión y enriquecimiento curricular que
insistan en profundizar en los contenidos curriculares o facilitarles materiales y actividades
extracurriculares, no avanzar tareas y materias de cursos posteriores.
Mediante este criterio, se garantiza la integración e interacción del alumno en el grupo,
se evita la exclusividad, el aislamiento y permite establecer las ayudas y apoyos, en
correspondencia con las potencialidades y posibilidades talentosas. Se hace necesario elevar
los niveles de implicación personal y creatividad de los estudiantes que cursan en escuelas
pedagógicas, y poseen este tipo de talento, como una alternativa para potenciar la formación
de un pedagogo con pleno dominio de las materias que deberá impartir, con un amplio
vocabulario, desarrollo del pensamiento divergente que le permita dirigir un proceso docente-
educativo de calidad y que a su vez, sea capaz de ofrecer una atención integral a las
necesidades educativas especiales de sus propios discentes.
El talento académico se presenta como una la potencialidad de tener un desempeño
sobresaliente. Para que esto suceda, cumplen un rol fundamental los catalizadores
ambientales como el apoyo de personas significativas, el contexto, las intervenciones
educacionales y el accionar de los maestros. (Gagné, 2004).
El presente artículo se acoge a la definición de Talento Académico que aporta Gagné,
(2004). Este investigador lo define como el desempeño destacado en algún área académica o
científica del quehacer humano, y que implica ubicarse en el 10% superior en comparación
al desempeño logrado por el grupo de pares.
A partir de los fundamentos teóricos antes asumidos, se considera que la estimulación
del talento académico en las escuelas primarias es una tarea que debe estar priorizada por el
colectivo docente y generalmente son insuficientes las acciones para potenciar su desarrollo,
debido al desconocimiento del claustro en el tema de referencia. Debe reconocerse que la
posibilidad real de la estimulación está en sus manos, con la utilización de alternativas desde
el PEA, acciones que deben desarrollarse y de esta manera eliminar la mirada elitista que se
ha dado a la formación del talento. La preparación adecuada del docente promueve
oportunidades que sirven para desarrollar habilidades y conocimientos que hacen que las
expectativas visionarias se conviertan en realidad en la futura clase.
“La asesoría psicopedagógica es un servicio a profesionales, cuya función principal es
el tratamiento a los contenidos psicopedagógicos que se presentan en el ejercicio de la